Testo 42 Gramos

Testo 42 Gramos

Deje de contar estrellas para contar tus lunares
y sabes, sin duda mereció la pena.
La espera, el esfuerzo, el tiempo que invertí, es que el cielo no es el cielo si no estoy junto a ti.
Soñé, y el universo conspiró, y encontré, aquello que nadie perdió.
El tiempo hizo las paces entre mares y playas y robé cada segundo siendo uno con tus pisadas.
Cargaré con tu maleta, coge tu mi chaqueta, si ves que el viento sopla, si ves que el frío aprieta. Cada grieta en cada piedra, cada herida que no cierra, puede que cicatrice pero siempre deja huella.
Y aquí me hallo desenfocado entre la niebla, y ahora callo, cuando me dices que no emprenda el camino que te dibujé cuando estuve perdido.
Quieres que me quede pero, yo ya me he ido.

A cualquier lugar, lleva conmigo las piedras que me hicieron tropezar.
Si no vas a estar, déjame algo que me entienda, las heridas no se cierran.

Perdí momentos y perderé momentos, pero no puedo perderme toda una vida. Poco a poco nos perdemos, tus gritos, mis silencios. Todos perdonados pero esto no cicatriza.
Si no vienes conmigo al menos deja que me marche, no sé si esta vela aguantará otro parche. Tus labios, hoy salados, se encuentran con los míos, intentando recordar si fue real lo que sentimos.
Sí lo fue, pero quizá pasó su tiempo, y se fue. Aunque quizá en otro momento, más adelante, volvamos a encontrar historias que compaginen y compartan el final.
Donde el fuego no derrita el hielo y pueda seguir siendo la estrella que calienta todo el cielo cual incendio.
Es que no existe universo donde yo me quede aquí, te añoraré en cada paso que dé sin ti.

A cualquier lugar, lleva conmigo las piedras que me hicieron tropezar.
Si no vas a estar, déjame algo que me entienda, las heridas no se cierran.

Ahora coges mi maleta y me ofreces tu chaqueta, ahora que el viento sopla, ahora que el frío aprieta.
Las palabras se esfumaron y aparecieron gestos, y nuestras manos se besaron con los dedos.
Caminos distintos pero no tan distantes, hay piratas y navíos comerciales en los mares. Y si chocamos, pues al abordaje, que el oleaje sienta lo que es ser salvaje.
Y es que por mucho que huyamos siempre nos encontramos, nos hicieron siendo 42 gramos. Sean puestas de sol o sean amaneceres, cuando se encuentran contrarios multiplican sus poderes.
Siempre fuimos lo que somos aunque intentemos negarlo, no existen palabras que pudiesen explicarlo.
No existe universo donde yo exista sin ti, y es que el cielo no es el cielo si no estoy junto a ti.

Me falta tu calor
Hace tiempo ya que desapareció
Que alguien busque más allá de esta canción
Que alguien encuentre eso que perdimos los dos

A cualquier lugar, lleva conmigo las piedras que me hicieron tropezar.
Si no vas a estar, déjame algo que me entienda, las heridas no se cierran.

Testi JPelirrojo